Aprovechando que estamos disfrutando de unos días soleados y con temperaturas más altas de lo normal para la época del año en la que estamos, voy a aprovechar para presentaros una ensalada de primavera elaborada a base de patata, remolacha y una improvisada brandada de bonito.
Curiosamente, la remolacha no es uno de los productos que más llaman mi atención en cuanto al sabor se refiere pero hace poco vi al lado de casa un manojo y me lo llevé sin dudarlo un segundo. Principalmente tenía curiosidad por comprobar las diferencias de la remolacha fresca con la que te venden lista para el consumo en bolsitas al vacío.
Pues bien, es como todo, quiero creer que estaba más rica (os aseguro que lo estaba) y con una textura menos blanda al paladar que la plastificada. Quizá es lo que más me gustó de esta experiencia, de sabor delicioso y menos ácido a la vez que con una estructura más firme y consistente. Como es habitual, os recomiendo que probéis a comprar el producto fresco y a elaborarlo en casa cuando dispongáis de tiempo, no deja de ser algo nuevo y gratificante para los que nos gusta la cocina.
Como habéis leído al principio, hoy presento una receta que anuncia la Primavera, para lo cual no hay mejor momento porque la Comunidad Cocineros del Mundo de Google+ está de celebración. De esta forma y con esta receta participo en el 1er Aniversario del Reto Cocineros del Mundo.
Y por supuesto espero que os chupéis los dedos con ella. ¡Al lío!
Ingredientes para 4 personas
Para el milhojas
- 2 o 3 patatas grandes
- 1 manojo de remolacha fresca
Para la brandada
- 1 cebolleta grande
- 2 latas medianas de bonito en aceite de oliva
- 2 huevos
- El zumo de un limón
- Un chorro de leche
- Aceite de oliva virgen, sal y pimienta
Elaboración
Hoy vamos a preparar la típica ensalada de remolacha con patata pero con un cambio en su aspecto y en el nombre para darle ese punto moderno que tanto gusta a algunos.
Evidentemente, la ejecución no lo es todo pues el plato debe quedar vistoso y es algo en que debemos trabajar poco a poco para que nuestras elaboraciones resulten atractivas a la vista y sobre todo apetecibles.
Del milhojas
1- Lavamos bien el manojo de remolacha bajo un chorro de agua, quitando los restos de tierra y raíces que pudieran quedar. Colocamos en una cacerola con agua y sal, dejando cocer en torno a 1 hora y 1/4 con la tapadera puesta y a fuego medio. Acordaos de no quitar los tallos porque si no, ¡dicen que la remolacha se desangra!
2- Lavamos y ponemos a cocer las patatas en una cacerola con agua y un puñado de sal. Dejamos a fuego lento hasta que la patata esté hecha, sobre los 30 minutos.
Una vez haya terminado el proceso de cocción de ambos ingredientes, los reservamos y dejamos que se enfríen para poder manipularlos posteriormente sin quemarnos.
3- Cortamos con cuidado la patata en rodajas de grosor medio y reservamos.
Para preparar la remolacha, ya os imagináis lo que ésto puede suponer y estaréis esperando a que cuente algún truco para no ponerse perdido... pero no, no lo tengo aunque os puedo decir que mucha gente utiliza unos socorridos guantes de latex. Como soy un poco bruto no me puse protección, sin antes haber comprobado que tampoco era para tanto y que con agua y jabón conseguía quitarme el potente tinte natural que posee.
4- Con un cuchillo desprendemos los tallos y entonces las pelamos con cuidado y hacemos rodajas finas. Reservamos igualmente.
De la brandada
1- Limpiamos y picamos muy fina la cebolleta, reservando en un cuenco.
2- Añadimos el bonito en aceite bien escurrido.
3- Hacemos una mayonesa de 2 huevos con batidora y al final le añadimos un poco de leche para conseguir que ésta sea más liquida de lo usual y dotar al plato de un punto jugoso que el resto de ingredientes no lo proporciona.
4- Añadimos pimienta negra recién molida, mezclamos todos los ingredientes y removemos con una cuchara hasta que consigamos una brandada a nuestro gusto. Reservamos en la nevera.
Presentación del plato
1- Colocamos un molde circular sobre la fuente que utilicemos para presentar y vamos colocando capas con la patata, la brandada y la remolacha según nos parezca. En mi opinión, es aconsejable que los dos primeros ingredientes estén juntos para conseguir un efecto más homogéneo al degustar el milhojas.
2- Terminamos colocando ensalada de brotes tiernos, canónigos, escarola o la que más os guste alrededor del molde y decoramos el milhojas con unas hojas de perejil fresco y una pizca de cebolleta picada.
Como todavía no hace calor, aunque algunos ya estén soñando con la playa y las cervecitas, mi recomendación es degustar esta ensalada a temperatura ambiente salvo la brandada que podremos sacarla de la nevera 1/2 hora antes de sentarnos a la mesa para que no esté demasiado fría.
Si nunca habéis probado este milhojas de remolacha, animaos a hacerlo porque además de ser muy nutritiva y sana volveréis a repetir seguro.
Como habéis leído al principio, hoy presento una receta que anuncia la Primavera, para lo cual no hay mejor momento porque la Comunidad Cocineros del Mundo de Google+ está de celebración. De esta forma y con esta receta participo en el 1er Aniversario del Reto Cocineros del Mundo.
Y por supuesto espero que os chupéis los dedos con ella. ¡Al lío!
Ingredientes para 4 personas
Para el milhojas
- 2 o 3 patatas grandes
- 1 manojo de remolacha fresca
Para la brandada
- 1 cebolleta grande
- 2 latas medianas de bonito en aceite de oliva
- 2 huevos
- El zumo de un limón
- Un chorro de leche
- Aceite de oliva virgen, sal y pimienta
Elaboración
Hoy vamos a preparar la típica ensalada de remolacha con patata pero con un cambio en su aspecto y en el nombre para darle ese punto moderno que tanto gusta a algunos.
Evidentemente, la ejecución no lo es todo pues el plato debe quedar vistoso y es algo en que debemos trabajar poco a poco para que nuestras elaboraciones resulten atractivas a la vista y sobre todo apetecibles.
Del milhojas
1- Lavamos bien el manojo de remolacha bajo un chorro de agua, quitando los restos de tierra y raíces que pudieran quedar. Colocamos en una cacerola con agua y sal, dejando cocer en torno a 1 hora y 1/4 con la tapadera puesta y a fuego medio. Acordaos de no quitar los tallos porque si no, ¡dicen que la remolacha se desangra!
2- Lavamos y ponemos a cocer las patatas en una cacerola con agua y un puñado de sal. Dejamos a fuego lento hasta que la patata esté hecha, sobre los 30 minutos.
Una vez haya terminado el proceso de cocción de ambos ingredientes, los reservamos y dejamos que se enfríen para poder manipularlos posteriormente sin quemarnos.
3- Cortamos con cuidado la patata en rodajas de grosor medio y reservamos.
Para preparar la remolacha, ya os imagináis lo que ésto puede suponer y estaréis esperando a que cuente algún truco para no ponerse perdido... pero no, no lo tengo aunque os puedo decir que mucha gente utiliza unos socorridos guantes de latex. Como soy un poco bruto no me puse protección, sin antes haber comprobado que tampoco era para tanto y que con agua y jabón conseguía quitarme el potente tinte natural que posee.
4- Con un cuchillo desprendemos los tallos y entonces las pelamos con cuidado y hacemos rodajas finas. Reservamos igualmente.
De la brandada
1- Limpiamos y picamos muy fina la cebolleta, reservando en un cuenco.
2- Añadimos el bonito en aceite bien escurrido.
3- Hacemos una mayonesa de 2 huevos con batidora y al final le añadimos un poco de leche para conseguir que ésta sea más liquida de lo usual y dotar al plato de un punto jugoso que el resto de ingredientes no lo proporciona.
4- Añadimos pimienta negra recién molida, mezclamos todos los ingredientes y removemos con una cuchara hasta que consigamos una brandada a nuestro gusto. Reservamos en la nevera.
Presentación del plato
1- Colocamos un molde circular sobre la fuente que utilicemos para presentar y vamos colocando capas con la patata, la brandada y la remolacha según nos parezca. En mi opinión, es aconsejable que los dos primeros ingredientes estén juntos para conseguir un efecto más homogéneo al degustar el milhojas.
2- Terminamos colocando ensalada de brotes tiernos, canónigos, escarola o la que más os guste alrededor del molde y decoramos el milhojas con unas hojas de perejil fresco y una pizca de cebolleta picada.
Como todavía no hace calor, aunque algunos ya estén soñando con la playa y las cervecitas, mi recomendación es degustar esta ensalada a temperatura ambiente salvo la brandada que podremos sacarla de la nevera 1/2 hora antes de sentarnos a la mesa para que no esté demasiado fría.
Si nunca habéis probado este milhojas de remolacha, animaos a hacerlo porque además de ser muy nutritiva y sana volveréis a repetir seguro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario